miércoles, 10 de febrero de 2010

Declaracion Multipartadiaria en Almirante Brown

POR LA DEFENSA Y PROFUNDIZACION DEL PROYECTO NACIONAL, POPULAR, DEMOCRATICO Y PROGRESISTA

Los agrupamientos políticos y sociales abajo firmantes, consideramos que vivimos días de definición acerca de qué modelo de Nación construimos. Un país integrado definitivamente a Latinoamérica, con índices claros de desarrollo productivo e integración social, culturalmente democrático y soberano en sus decisiones, o una Nación subordinada a los apetitos de las corporaciones monopólicas consolidadas en el proceso de la dictadura y la transnacionalización neoliberal de los ’90.
Queda claro frente a los hechos objetivos de seis años de gestión que el 25 de mayo de 2003 se plasmó en nuestra sociedad la voluntad de cambio a través de las políticas del ex Presidente Néstor Kirchner y la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner. El conflicto con las corporaciones agromediáticas desatado en el 2008 puso de manifiesto la vieja tensión existente entre el modelo agroexportador y el modelo industrialista. Nuevamente reaparece desde las tinieblas el bloque histórico dominante con sus expositores de la derecha económica, política y cultural, rechazando mediante actitudes hasta destituyentes toda posibilidad de construir a través de políticas públicas un país pleno de derechos. Este panorama demuestra la necesidad de reafirmar los valores fundantes del proyecto nacional, popular, democrático y progresista instrumentado desde el año 2003, como así también realizar una convocatoria amplia a nuestros conciudadanos a defender lo alcanzado y profundizar el camino.
Esto nos obliga a construir un espacio político y social sumamente articulador, abierto, plural y movilizado en la defensa y diseño de las políticas públicas transformadoras de los resabios de injusticia y desigualdad del Estado neoliberal. Espacio o frente que termine con el hegemonismo interno que impone de facto el carácter monocorde y disciplinador de una sola fuerza partidaria. Consideramos que el futuro de los argentinos no es monopolio de un partido, y por ello reafirmamos nuestra vocación frentista y amplia para la construcción de una fuerza que dispute fortalecida en nuestra sociedad el poder al neoconservadurismo. Esta pluralidad y participación imprescindible nos lleva a plantear con carácter inexorable la necesidad de una real institucionalización del Frente para la Victoria, para dotar a estas transformaciones de una continuidad trascendente y colectiva.
Respecto al ámbito local, sentimos que el impulso transformador llevado adelante desde la asunción del Compañero Intendente Darío Giustozzi, se ve afectado por la falta de renovación dirigencial que conduce al desánimo, que se manifiesta en la débil participación cuando no marginación, de dirigentes competentes, militantes valiosos y la fuerza contenida de un capital social que a menudo encuentra alternativas creativas, pero que con frecuencia se diluyen aisladas del proyecto global de ciudad que las contenga.
Por lo antedicho, convocamos a debatir, enriquecer y llevar adelante los siguientes ejes conceptuales:
• Nuestro compromiso de forjar una nueva cultura política que elabore ideas y propuestas desde la participación plena de nuestro pueblo;
• La lucha irrenunciable por el reconocimiento de la C.T.A., y la profundización de toda medida tendiente a garantizar el pluralismo sindical y los derechos de los trabajadores sindicalizados o no;
• La necesidad de una reforma tributaria más justa y progresiva;
• La reforma de la Carta Orgánica del B.C.R.A. y la Ley de Entidades Financieras como pilar de una política económica al servicio de la producción nacional, con sus derivaciones en los planos provinciales y municipales;
• La exigencia de profundizar la reforma política, para no dejarla en los aspectos meramente electorales, sino en consolidar a los partidos políticos como instituciones de debate, formación dirigencial y formulación de propuestas;
• La necesidad de establecer una ética pública que garantice la transparencia de los funcionarios públicos, siendo uno de sus elementos iniciales el control de gastos y la limitación de fondos reservados también sujetos a auditoría;
• El compromiso de luchar y acompañar la implementación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual, con el objetivo de multiplicar voces y debates, descolonizando así el carácter oligopólico que imprimen las empresas mediáticas concentradas;
• La implementación de un modelo de desarrollo sustentable en relación al cuidado del ambiente, que implique la coordinación de instancias legales, políticas, económicas sociales y tecnológicas;
• La construcción de un Estado fraterno, que coordine, articule y potencie el capital social atendiendo prioritariamente las necesidades de los sectores más postergados;
• En el plano local:
• el compromiso por mejorar los parámetros de transparencia y eficacia de la gestión pública;
• El desarrollo de instrumentos que vinculen a los ciudadanos con la gestión, como el presupuesto participativo, planificación estratégica, audiencia pública, la consulta y la iniciativa popular, entre otros;
• Como consecuencia de lo anterior, la coordinación con otras intendencias de la región, para promover el desarrollo económico general y un nuevo impulso al sudeste de la provincia de Buenos Aires.


Pdo. Socialista, Frente Transversal Nacional y Popular, Pdo. Encuentro por la Democracia y la Equidad, Pdo. Solidario, Pdo. Frente Grande, Pdo. Comunista C. E.


Almirante Brown, Febrero de 2010.

miércoles, 3 de febrero de 2010

“Priorizan las encuestas a los proyectos”


ARIEL BASTEIRO, DIPUTADO SOCIALISTA EN EL BLOQUE ENCUENTRO POPULAR Y SOCIAL

Pagina 12

El diputado Ariel Basteiro pasa sus vacaciones en la playa, pero el conflicto por el uso de reservas para el pago de deuda lo ha obligado a viajar más de una vez a la ciudad de Buenos Aires. “No es el primer verano complicado”, aclara, y recuerda que el 2002, cuando el país se debatía tras los espasmos de la crisis de fines del año anterior, lo encontró haciendo sus primeras armas en la Cámara baja. Ahora, más experimentado, forma parte del llamado grupo “C”, el bloque de legisladores de centroizquierda que no se alinearon ni con el Gobierno ni con la oposición en los debates por el reparto de cargos. Pero se define: “Hoy por hoy, las propuestas de izquierda las sigue llevando adelante el kirchnerismo. En función de eso, me parece más que lógico que sigamos apoyando a este Gobierno en esas iniciativas”.

–Si la propuesta del Gobierno de utilizar reservas para el pago de deuda externa llega al Congreso, ¿cuál va a ser la postura de su bloque?

–La posición que tenemos es que hay que investigar. Que después haya argumentos para decir que esa auditoría va a arrojar pocos resultados porque gran parte de la deuda ilegal ya fue pagada, o que pasó a manos de pequeños ahorristas y jubilados argentinos luego del corralito, es otro tema. Pero nuestra postura es que debe investigarse la legitimidad de la deuda. Habría que determinar las responsabilidades de las empresas y personas que se vieron beneficiadas, para sancionarlos. Por eso creo que la investigación hay que hacerla y que el país además debe discutir otra cosa: no pagar la deuda a los organismos internacionales hasta tanto no se salde la deuda interna con los más necesitados.

–Es decir que en ese caso votarían distinto al bloque del Frente para la Victoria...

–Creo que por lo menos habría que poner ciertos condicionamientos. Después veremos el resultado, pero las razones que nos lleven a votar a favor o en contra van a ser bien diferentes que las que sigan el Frente para la Victoria y otros grupos de centroizquierda, que tienen una postura principista.

–¿Por qué el centroizquierda no puede articular un bloque único? En el otro espacio hay gente, como la de Libres del Sur, con la que estuvo trabajando codo a codo hasta hace poco...

–Lo lamento muchísimo. En algunos casos, la posición que pueden tener algunos que accedieron ahora a la Cámara es diferente de la situación de otros diputados que llegaron a través de frentes o alianzas y hoy tienen una posición distante de las alianzas que los llevaron al Congreso. En cuanto a las razones, creo que es porque priorizan las encuestas a los proyectos. Terminan mirando cuál es el nivel de popularidad del matrimonio Kirchner y eso hace que se alejen cuando hace un año y medio su posición era diferente, y no ha habido en el Gobierno un cambio, se llevó adelante lo que se dijo que iba a hacerse, la ley de medios audiovisuales, la nacionalización de las AFJP y Aerolíneas, los proyectos ligados a reclamos de las organizaciones de derechos humanos... Lo único que cambió fue su nivel de popularidad.

–Ustedes acompañan el proyecto del Gobierno sin ser kirchneristas, y están dentro del socialismo sin alinearse con la conducción nacional del PS. ¿Se siente un “outsider”?

–Nosotros hicimos siempre lo que quisimos llevar adelante, y avanzamos en la conformación de un frente de izquierda. Hoy por hoy, las propuestas de la izquierda las sigue llevando el kirchnerismo y, en función de eso, me parece más que lógico que sigamos apoyando a este Gobierno. Pero no somos del Frente para la Victoria. Estamos integrados por partidos autónomos y con posibilidad de criticar desde afuera, y eso le hace bien al proyecto en general. En cuando al socialismo, hay que aclarar que estamos adentro del partido. No fuimos expulsados ni renunciamos: somos las autoridades del PS en la provincia de Buenos Aires. Y no somos los únicos que disentimos con la conducción nacional. La Rioja, Chubut, gran parte de Córdoba y una parte importante de la Capital también están encolumnados con nuestra postura y no quieren estar aliados con Cobos y con Carrió.

–En las últimas semanas se habló de la posibilidad de un gran frente de centroizquierda con la participación del PS. En caso de que eso suceda, ¿cree posible que se reunifique el partido?

–Es mucho más llevadero o aceptable que el partido trate de hacer una construcción con el centroizquierda a que lo haga con la Coalición Cívica y el radicalismo. En ese sentido, no tendría objeciones que hacer y, en la medida en que se haga desde una postura propositiva, no lo descartaría. Lo cierto es que el partido se encuentra en esta discusión porque todo está atado a la conveniencia de algunos personajes y no al bien de todos. Una alianza así no puede ser coyuntural, sino que debe ser una postura mantenida en el tiempo.

Informe: Nicolás Lantos.